La destrucción del semiárido larense ha contribuido conque tres especies animales endémicas en Lara estén en peligro de extinción y una se encuentre en riesgo, lo que ha activado planes de conservación por parte de grupos en defensa del ambiente con apoyo gubernamental para la protección de estos animales y su hábitat.
Las especies en peligro de extinción son el cardenalito, el oso frontino, y el paujil copete de piedra, mientras que la cotorra cabeza amarilla entró en su fase de riesgo al denotar disminución de su población, pues según datos del libro rojo de la fauna venezolana, alrededor de 4.700 aves estarían en estado de libertad, cuando su población estable debería ser mayor a las 10 mil aves.
Jhoana Rivero, del Observatorio Nacional de Aves, explicó que a pesar de que el hábitat de estas especies ha sido destruido por la tala y la quema indiscriminada, la comercialización y el tráfico de estos animales ha sumado a que su población se reduzca y la capacidad reproductora se pierda.
«Tristemente, estas especies están desapareciendo gracias a la acción humana, en el caso del paují su disminución poblacional se debe al daño de su ecosistema que les impide reproducirse, anidar y desarrollarse y que al sentirse sola y desprotegida muere, ya que la especie es intolerante a modificaciones de su localidad natural», destacó Rivero, refiriendo que datos estiman que unas 2.500 aves maduras son las que existen en el territorio.
Con información de La Prensa de Lara