El gobierno de Donald Trump impuso este martes dos nuevas medidas para acorralar a los migrantes indocumentados o con estatus legal frágil, con el firme objetivo de adelantar su política de deportaciones masivas.
La primera de estas medidas tiene que ver con la revocatoria del estatus legal temporal otorgado a migrantes que ingresaron a Estados Unidos mediante la aplicación CBP One, utilizada durante el gobierno de Joe Biden.
Desde enero de 2023, más de 900.000 personas accedieron a EEUU por esta vía, recibiendo permisos temporales de permanencia y autorización para trabajar. Sin embargo, la nueva administración ha considerado que el uso de esta figura legal —conocida como “parole”— exacerbó la crisis fronteriza y comprometió la seguridad nacional.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) confirmó este lunes que los beneficiarios han comenzado a recibir notificaciones instándolos a abandonar el país “de inmediato”, según reportan medios de comunicación. “El fin de estos permisos cumple con nuestra promesa de restaurar el control fronterizo”, afirmó el DHS.
La otra medida notificada por el gobierno de Trump, impone multas a migrantes indocumentados de hasta $998 por día si no salen de Estados Unidos y promete confiscar sus propiedades si no pagan dicha multa.
Las multas se derivan de una ley de 1996 que se impuso por primera vez en 2018, durante el primer mandato del presidente Donald Trump. La administración Trump planea aplicar las sanciones retroactivamente hasta por cinco años, lo que podría resultar en multas de más de un millón de dólares, dijo un alto funcionario de Trump, que pidió el anonimato para discutir planes no públicos.
Los correos electrónicos revisados por Reuters muestran que la Casa Blanca ha presionado a EE.UU. Aduanas y Protección Fronteriza para manejar el tema de las sanciones, confiscaciones de propiedades para los migrantes que no pagan, y la venta de sus activos. El presidente Donald Trump inició una amplia represión migratoria tras asumir el cargo en enero, donde puso a prueba los límites de la ley estadounidense para aumentar los arrestos y deportaciones.
Con información de ÚN