La Comisión Europea (CE) anunció este jueves un litigio ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) contra Estados Unidos por sus aranceles universales y los que ha impuesto a automóviles y piezas de automóviles, con la presentación formal de una solicitud de consultas en Ginebra.
En paralelo, la Comisión abrió este jueves una consulta pública sobre una nueva lista de productos industriales y agrícolas estadounidenses, por valor de 95.000 millones de euros, a los que podría imponer aranceles como contramedida si fracasan las negociaciones sobre la guerra comercial con Washington, que incluyen artículos como el bourbon.
También va a consultar sobre la posibilidad de restringir determinadas exportaciones a Estados Unidos de chatarra de acero y productos químicos desde la Unión Europea, por un valor de 4.400 millones de euros.
La Comisión, que no ha querido dar detalles sobre cómo marchan las conversaciones con Washington, está dispuesta a contemplar esas nuevas contramedidas si las negociaciones “no desembocan en un resultado mutuamente beneficioso y en la supresión de los aranceles estadounidenses”.
El movimiento responde igualmente a los aranceles generales del 10 % que aplica EE. UU. y del 25 % a los coches y sus componentes.
“La UE sigue plenamente comprometida con la búsqueda de resultados negociados con Estados Unidos. Creemos que pueden alcanzarse buenos acuerdos en beneficio de los consumidores y las empresas de ambos lados del Atlántico”, indicó en un comunicado la presidenta de la CE, Ursula von der Leyen.
Agregó que, al mismo tiempo, seguimos preparándonos para todas las posibilidades, “y la consulta impulsada hoy -que estará abierta hasta el 10 de junio- nos ayudará a orientarnos en este trabajo necesario”.
La opinión de la Unión Europea (UE) es que los aranceles estadounidenses “violan flagrantemente las normas fundamentales de la OMC”, según explicó la Comisión, cuyo objetivo es “reafirmar que las normas acordadas internacionalmente son importantes y no pueden ser incumplidas unilateralmente por ningún miembro” de la organización con sede en Ginebra.
El primer paso de un proceso ante la OMC, recordó la Comisión, es pedir a otro país celebrar consultas para tratar de solucionar sus diferencias: “Hoy lo anunciamos y es algo que vamos a hacer en las próximas semanas”, indicaron fuentes comunitarias.
Una vez que la UE presente formalmente su solicitud de consultas a la OMC, las dos partes tendrán hasta dos meses para encontrar una solución de mutuo acuerdo y, si las conversaciones fracasan, la UE podrá solicitar la creación de un panel que evaluará el fondo del asunto.
La Comisión también indicó que sigue vigilando atentamente el posible desvío de exportaciones mundiales hacia el mercado de la UE que podría provocar los aranceles estadounidenses impuestos a terceros países.
Entre tanto, aseguró que “seguirá negociando con otros socios comerciales para encontrar nuevas salidas a las exportaciones y diversificar nuestras fuentes de suministro”, así como trabajando para reducir las barreras y reforzar el mercado único de la UE.
Fuentes comunitarias subrayaron que, más que de “represalias”, es necesario hablar de “reequilibrar” la situación si los aranceles estadounidenses finalmente se mantienen más a medio o largo plazo.
Sobre el anuncio de EE. UU. de que podría imponer aranceles del 100 % a las películas producidas fuera del país, las fuentes dijeron que dejan “abiertas todas las posibilidades, incluido medidas sobre servicios”, y aunque por el momento no van a abrir una consulta pública sobre ese sector aseguraron que la Comisión está abordando el caso.
“Primero tenemos que ver qué medidas queremos y, luego, qué instrumento legal emplear. El instrumento anticoerción es una posibilidad”, recordaron.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha impuesto aranceles del 25 % al acero, el aluminio y los automóviles europeos, así como un tipo general del 10 % a las importaciones de la UE.
Y ha suspendido hasta principios de julio la duplicación de ese arancel fijo al 20 %, a la espera de las negociaciones con el bloque comunitario que capitanea la CE.
Por su parte, el Ejecutivo comunitario adoptó a mediados de abril contramedidas valoradas en 26.000 millones de euros en aranceles a importaciones de EE. UU. en respuesta a los impuestos por Trump al acero y al aluminio, que están congelados para dar una oportunidad a la negociación con Washington.
Con información de EFE