La primera Ley de Salud Mental de Venezuela se aprobó en el estado Zulia por el Consejo Legislativo y promulgada el 15 de noviembre de 2023. José Leonardo Caldera, psicólogo y legislador encargado de la propuesta, explicó que este es el primer paso para impulsar una ley nacional que ampare, defienda, promueva y prevenga los efectos de la salud mental en la población.
“Esta es una herramienta para aquellas personas que históricamente han sido dejadas a un lado por padecer problemas de salud mental, de los cuales ninguno está exento porque las estadísticas mundiales hablan de que 70% de la población en algún momento va a presentar algún síntoma asociado a esta patología como ansiedad, depresión o estrés y Venezuela no es la excepción”, dijo el legislador.
Caldera explicó que la iniciativa nació para orientar a las personas sobre la importancia de la salud mental, pero, además, de la necesidad de tener una atención adecuada. Indicó que mientras en España, Argentina y Chile hay de 14 a 17 profesionales de la salud mental para cada 100.000 habitantes, en Venezuela hay 0,7 para la misma cantidad de personas.
“Es decir que estamos muy por debajo de la capacidad para atender toda la demanda de la población”, comentó.
La Fundación Zuliana Rehabilitarte, en su último informe de 2023, reveló que seis de cada 10 personas en el estado padecen malestar psicológico en mayor o menor medida. Es decir que 2.300.434 zulianos, presentan alteraciones emocionales y actitudes con respecto a la salud mental, si se toma como referencia el último censo poblacional del estado con 3.704.404 habitantes.
Para Caldera este tipo de instrumento legal es importante porque permite garantizar y salvaguardar el acceso a la atención en materia de salud mental. “En la actualidad cuando un paciente va a algún centro de salud o clínica a buscar una cita se la dan para dentro de tres meses, y en muchos centros asistenciales se ha eliminado la consulta psicológica”, reveló.
Responsabilidad de todos
La responsabilidad del Estado en mantener políticas públicas que prevengan esta patología se ha visto mermada en la entidad. El psicólogo refirió que el Hospital Psiquiátrico de Maracaibo, aunque ha sido atendido en equipamiento de luminarias, colchonetas y climatización por parte del Gobierno regional, la falta de medicamentos y fallas en el suministro de alimentos persisten.
Caldera insistió en que también se deben establecer responsabilidades en los grupos familiares que tengan algún miembro afectado en este sentido.
Los familiares, en muchas ocasiones por falta de orientación, formación o recursos terminan abandonado a sus iguales y dejándolos en estado de indigencia. El Estado tiene que salvaguardar a estas personas, pero las familias tienen una responsabilidad directa y es un trabajo que tenemos que hacer entre todos, entonces esta ley pasa a convertirse en esa herramienta”.
En el Hospital Psiquiátrico de Maracaibo funcionan solo dos salas divididas entre mujeres y hombres, en las que se atienden 32 personas. Se estima que en el Zulia hay aproximadamente 30 personas en estado de abandono familiar con condiciones psicológicas o psiquiátricas.
Prevención y formación
Caldera adelantó que, con el apoyo del Colegio Regional de Psicólogos, han comenzado a formar a 150 oficiales de la policía regional, otro grupo de la municipal además de bomberos y Protección Civil, para sensibilizarlos y que aprendan a dar los primeros auxilios psicológicos.
Lo siguiente es incluir en la formación a través de talleres a 11.000 docentes para que puedan identificar rasgos de abuso intrafamiliar y ampliar la atención.
El legislador zuliano refirió que hay vacíos legales que deben ser atacados con prontitud. Tal es el caso de los menores de edad que presentan cuadros de esquizofrenia porque en el Zulia no hay un centro de atención pediátrica para estos casos. Tampoco pueden admitirse en centros psiquiátricos porque la Lopna prohíbe el aislamiento de menores de edad.
“Hoy en día en Venezuela un joven que sufre de esquizofrenia y que necesita atención no la puede recibir porque no hay donde atenderlo. Estos temas se han abordado en la ley y hemos hecho las observaciones a los entes encargados para buscar una solución integral”, dijo.
El acceso a los medicamentos es otra de las luchas que mantiene la legislación zuliana, debido al alto costo de los psicofármacos. Aunque deberían ser garantizados por el Estado a través de la Sanidad, este no cubre la demanda.
Por ejemplo, una persona con una condición menor como la bipolaridad, debe disponer de al menos 50 dólares mensuales para cubrir su tratamiento, mientras que para la esquizofrenia pasa los 80 dólares.
La realidad es que los medicamentos que llegan al Hospital Psiquiátrico de Maracaibo son dispensados a la Sanidad por las autoridades únicas que ha nombrado el Gobierno nacional y llegan con poca frecuencia, cuando llegan, no son suficientes. Sin embargo, hay organizaciones que hacen un gran trabajo a través de donaciones. Las ONG que están en la mira del gobierno también es una cuestión que nos tiene preocupados”, finalizó.
La Ley de Salud Mental del Zulia es la antesala a la búsqueda de un amparo mayor. La Superintendencia de Seguros no reconoce las crisis psiquiátricas como eventos catastróficos que ameriten cobertura del seguro.
Caldera adelantó que dedicarán este año a la construcción de esas políticas públicas y como primer paso viajarán en los próximos días a Medellín, Colombia, donde debatirán con las autoridades del vecino país sus avances e intercambiaran ideas.
Con información de Crónica Uno