Los daños que el sol causa en la piel van mucho más allá de una insolación; es por ello que, si amas exponerte a los rayos ultravioleta, debes conocer a qué te enfrentas, para aprender a cuidarte.
Entre los principales problemas que puedes enfrentarte por la exposición prolongada al sol sin la debida protección, se encuentra el envejecimiento prematuro, y que puede resultar en cáncer de piel.
Según los expertos, entre las complicaciones que pueden presentarse por la exposición al sol son: deterioro prematuro de la piel, manchas color café oscuro, quemaduras, melasmas, alergias y lesiones premalignas.
Incluso, otro de los daños que se puede presentar es el cáncer de piel, que afortunadamente, si se diagnostica de manera oportuna se puede tratar con éxito, sin llegar a la muerte.
¿Qué esperar?
Si las personas no toman las medidas de protección adecuadas, los daños que el sol causa pueden ser:
– Resecamiento.
– Enrojecimiento.
– Dilatación permanente de los poros.
– Acné.
– Aparición de arrugas, “patas de gallina”.
– Manchas claras u oscuras, dependiendo el color de la piel de la persona. Estas manchas suelen ser más común a partir de los 40 años.
– Cáncer de piel en tres tipos: carcinoma escamocelular, carcinoma basocelular y melanomas.
Afortunadamente todos estos daños se pueden prevenir utilizando bloqueador solar diariamente; usando sombreros, gorras o lentes oscuros para protegerse. Además, evitar exponerse al sol entre las 10 am y 4 pm, mantenerse hidratado e incrementar el consumo de frutas y verduras.
También, los expertos en el cuidado de la piel, recomiendan aplicar remedos caseros que ayuden a aliviar molestias, como irritación en la piel.
Con información de 2001
