Una joven del valle Hunter de Australia fue rescatada de una grieta después de siete horas. La joven de 23 años se vio envuelta en un aprieto mientras intentaba recuperar su teléfono móvil.
El incidente ocurrió a principios de este mes y terminó con una elaborada operación de rescate.
La mujer (23) estaba paseando con amigos por una propiedad privada en Laguna, a unos 120 kilómetros de Sydney, cuando se le cayó el teléfono móvil. Al intentar recuperarlo, se deslizó de cabeza en una grieta de tres metros de profundidad entre dos rocas. Sus amigos intentaron en vano durante aproximadamente una hora liberarla. Finalmente, sus amigos alertaron al servicio de rescate.
El servicio de ambulancias de Nueva Gales del Sur recibió la llamada de emergencia alrededor de las 9:30 a. m. del 12 de octubre. Los equipos de rescate de la policía, el departamento de bomberos y los voluntarios trabajaron durante las siguientes siete horas para liberar a la mujer de su apuro. Se tuvieron que retirar rocas pesadas y construir andamios alrededor de las rocas para aliviar la peligrosa situación.
Los equipos de rescate nunca habían tenido un caso como este antes
«Con ambos pies accesibles, el equipo se enfrentó al desafío de guiar a la paciente a través de una curva cerrada en forma de S durante el transcurso de una hora», informó la ambulancia de Nueva Gales del Sur en Facebook. Una roca de 500 kilogramos fue movida usando un cabrestante para finalmente liberar a la mujer alrededor de las 4:30 p.m.
«En mis 10 años como paramédico, nunca había vivido un caso como este. Fue un desafío, pero increíblemente gratificante», dijo Peter Watts de NSW Ambulance. «Cada paramédico cumplió una función y todos trabajamos increíblemente bien juntos para lograr un buen resultado para el paciente».
Milagrosamente, la mujer solo sufrió rasguños y hematomas menores, pero su teléfono celular quedó atrapado entre las rocas. Fue trasladada al hospital para observación.
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