Tener una buena digestión es el deseo de la mayoría de las personas, sobre todo de aquellos que aman comer de todo tipo de alimentos.
Según los expertos, tener una buena digestión implica que el organismo es capaz de obtener los elementos necesarios de cada comida y al mismo tiempo, eliminar lo innecesario.
En otras palabras, es deshacerse correctamente de las toxinas, y adquirir los elementos saludables de cada alimento, los cuales son indispensable para gozar de órganos saludables.
¿Cómo saber si tengo buena digestión?
Una señal de que las cosas están marchando bien a nivel digestivo es no estar inflamado, ni tener exceso en la producción de gases, por ejemplo.
Además, también es clave un hábito intestinal en el que se evacué una o dos veces al día, y que no genere dificultades, como diarrea, estreñimiento o algún otro síntoma molesto al defecar.
Es decir, si al ingerir gran variedad de alimentos son bien tolerados y no se experimentan molestias, náuseas o reacciones alérgicas, es un buen indicio de que la digestión está marchando muy bien.
Claves para una buena salud digestiva
1. Establecer y respetar el horario de cada una de las comidas; las cuales se sugieren deben ser mínimo cinco comidas ligeras al día.
2. Incluir en la dieta alimentos que sean de fácil digestión, como, por ejemplo, el pescado.
3. Realizar diariamente una actividad física: correr, caminar, trotar, bailar, yoga, etc.
4. Sentarse y disfrutar las comidas. Es necesario relajarse, comer con calma, masticar bien los alimentos y saborearlos.
5. Tomar agua durante todo el día.
6. Consumir fibra, ya que ayuda a regular la actividad intestinal.
7. Evitar grandes cantidades de sal en los alimentos.
8. Reducir el consumo de bebidas con gas.
9. Comer ligero y mínimo una hora antes de irte a dormir.
Con información de 2001
