Una piscina olímpica y otra de saltos ornamentales son parte de los múltiples espacios que conforman la Ciudad Universitaria de Caracas. Después de ocho años inoperativas y gracias a los trabajos de rehabilitación realizados por el Gobierno Nacional, este martes volvieron a recibir a los estudiantes de la Universidad Central de Venezuela en sus clases de natación y polo acuático.
En el Complejo de Piscinas, que fue intervenido integralmente por la Comisión Presidencial para la Recuperación de la UCV, el profesor Carlos Herrera indicó que se incorporaron en las clases de natación más de 300 estudiantes regulares de la universidad y los atletas con más experiencia.
“La universidad debe estar preparada para las competencias venideras como los juegos universitarios o cualquier tipo de invitación que nos hagan otras universidades”, aseveró en entrevista con el equipo de Últimas Noticias.
El entrenador de la selección de natación universitaria aseguró que la meta es abarcar al resto de la población ucevista, que incluye a los profesores, personal administrativo y obreros.
Informó que también prevén activar la escuela menor de natación, en la que atienden a los hijos del personal de la UCV, así como también a los chamos de las zonas cercanas al campus universitario.
Las clases de natación son de martes a viernes, de 9 de la mañana a 12 del mediodía. Herrera indicó que planean ampliar el horario en el turno de la tarde, de 3 a 5, para atender a la escuela menor y al resto de los participantes.
Bárbara De Almeida práctica natación desde los cuatro años y es una de las estudiantes que se ven beneficiada con la reactivación del lugar. “Me siento súper bien y contenta de poder aprovechar las piscinas de la universidad para entrenar un poco y mantenerme”, aseveró.
El polo acuático es otra disciplina que está disponible para la comunidad universitaria. Las clases con el profesor Miguel Piña son de martes a viernes, de 12 del mediodía hasta las 3 de la tarde.
Obras desarrolladas
En el año 2021, el Gobierno Nacional, a través de la Comisión Presidencial para la Recuperación de la UCV, comenzó las obras de rehabilitación del complejo de piscinas, que estaba en total abandono.
“Ha sido un trabajo bastante arduo que se ha desarrollado durante tres años, donde nos tocó recuperar la piscina que estaba prácticamente en el suelo”, aseguró el arquitecto Maximiliano Ovalles, inspector de las obras.
La recuperación de la piscina fue más allá de la construcción. Ovalles explicó que realizaron estudios técnicos con el Instituto de Materiales y Modelos Estructurales de la UCV para determinar las patologías que presentaba la infraestructura, además, revisaron la parte histórica para ver el concepto original de Carlos Raúl Villanueva sobre el complejo.
Precisó que, en primera instancia, realizaron las mejoras en la entrada de la piscina y el acceso a los vestuarios. Allí eliminaron dos árboles que dañaban la estructura y reconstruyeron el piso.
También ejecutaron labores de mantenimiento en general, que incluyó el desmanchado del concreto y el caico, el borrado de los grafitis que estaban en las paredes, obras menores de plomería y recuperación de la iluminación.
Luego llevaron a cabo los trabajos de mayor envergadura, como la recuperación de las fosas de las pis-cinas y la sala de máquinas e intervención de los baños y vestidores de mujeres y caballeros, donde instalaron un sistema de ducha forzado e hicieron nuevos módulos.
Asimismo, el arquitecto explicó que las obras abarcaron el edificio de la Dirección de Deportes, donde también funcionan los gimnasios de tenis de mesa, judo, taekwondo, esgrima y gimnasia.
En esa parte del complejo atendieron las filtraciones, colocaron luminarias, restauraron techos, ventanas y puertas de los espacios. De igual manera, devolvieron la ventilación original en una pared de bloque calado que había sido sellada y eliminaron otras intervenciones que violaba la originalidad del complejo, uno de los más de 100 edificios que conforman la UCV, Patrimonio Mundial de la Unesco.
Con información de ÚN
