Cuando una persona tiene un problema en su vehículo lo más lógico es que acuda a un taller mecánico a que los profesionales le echen un vistazo para poder detectar lo que le pasa y poder arreglarlo.
Sin embargo, como en todos los trabajos, siempre va a haber gente que piense que tiene la última palabra y que crea que puede dar consejos y opinar sobre la labor de otros con conocimiento de causa.
La proliferación de las redes sociales también ha contribuido a esta situación. En YouTube proliferan los vídeos sobre gente que arregla sus vehículos con trucos caseros que hacen que queden perfectos y parezca fácil hacerlo.
Harto de esta situación, un taller mecánico ha planteado una serie de tarifas especiales para la gente que no les deja trabajar, como ha publicado en Twitter el usuario Daniel Almansa, o @danalavac.
En el cartel se puede observar como por “estar mirando” se añade un extra de 10 euros al base de 34€ la hora que cobra de por sí el taller por el arreglo del coche. Además, si se mira y “opinas” serán otros 15 euros más para pagar.
Como mucha gente puede sentirse tentada de arreglar el problema por su cuenta, “si has andado toqueteando” habrá que aportar 25 euros, y si se hace “y no me lo dices” pues otros 40 euros.
Para finalizar, el dueño del establecimiento pone el extra más caro para las personas que le dicen que vio en Internet lo que está haciendo “y era facilísimo”. En esta situación serían 60 euros más a la factura.
Con información de cactus24